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Una alimentación variada y equilibrada es uno de los puntos más importantes antes de comprar creatina en nuestra tienda de deportes habitual, ya que es uno de los puntos a elaborar más influyentes en el resultado final de nuestra dieta.

Dicha alimentación tiene que ir acorde a las necesidades nutritivas de cada etapa del ciclo vital, permite gozar de buena salud con un correcto desarrollo físico e intelectual sin olvidar el consumo de productos que ofrezcan nutrición deportiva para perder o ganar calorías, según los objetivos y necesidades del consumidor. Pero al decidirse por un tipo de alimentación, también hay que tener en cuenta la actividad que se desarrolla.

En cada etapa de la vida no hay un único prototipo individual. Las necesidades energéticas y nutritivas no son las mismas para un atleta que añade en su dieta comprar creatina para luego consumirla, que para una persona sedentaria; una ama de casa con hijos, que para una mujer soltera que vive sola. Es importante aprender a elegir los alimentos más adecuados para rendir mejor. Por ello, a continuación nos vamos a centrar en los deportistas y sus necesidades alimentarias.

La alimentación del deportista debe compensar los gastos de energia que requiere su actividad con el fin de que el peso permanezca estable. Es, pues, normal que el atleta que basa su dieta en una nutrición deportiva coma más que una persona sedentaria, pero no debe caer en los errores más comunes que se dan en la nutrición deportiva. La nutricion del deportista, según los mas recientes conocimientos científicos, debe aportar cantidades equilibradas de hidratos de carbono, lípidos, proteinas, minerales, vitaminas y agua.

Tanto para asegurar su salud como para alcanzar un adecuado rendimiento y recuperación durante la actividad deportiva. El deportista se diferencia de la persona con actividad ligera en que su consumo energético es más elevado, y éste depende del tipo de ejercicio que realice, por ello la gran mayoria de ellos se ven en parte obligados a comprar creatina, ya que es una sustancia que les ofrece los nutrientes y características necesarias para su cuerpo. Para calcular las necesidades energéticas diarias es preciso conocer la intensidad del esfuerzo físico y su duración.

Las necesidades variarán de un deporte a otro según sea de duración larga (varias horas) e intensidad moderada: jogging, ciclismo, esquí de fondo, montañismo, natación (grandes distancias), tenis, etc. De duración media (alrededor de una o dos horas) e intensidad elevada: fútbol, baloncesto, balonmano, jockey, gimnasia, patinaje, squash, tenis de mesa, etc. O de duración breve (de algunos segundos a unos minutos) y esfuerzo intenso: esquí de descenso, salto de altura, lanzamiento de peso, judo, halterofilia, etc. Pero para realizar correctamente la nutrición deportiva, hay que tener en cuenta la edad, el sexo y las características físicas de cada deportista.

El primer suministrador de energía para satisfacer el gasto energético es el glucógeno, sustancia que se almacena en los músculos y en el hígado, dicha sustancia ofrece beneficios relativamente muy parecidos, si los comparamos con los que se ofrecen a la hora de comprar creatina, ya que para tonificar el cuerpo es una de las sustancias más usadas, aunque también se puede utilizar para adelgazar y perder peso. Pero las reservas de glucógeno son muy limitadas y se agotarían al realizar una actividad intensa durante unos 40 minutos. Así, a medida que se terminan, entran en combustión las grasas, que proporcionan la energía adicional necesaria.

La nutrición deportiva durante los entrenamientos es parecida a la dieta del individuo sano, debe ser variada, equilibrada y adecuada a los gustos de cada uno, aumentando el aporte energético en función del deporte que se realice. Los alimentos deben distribuirse a lo largo del día según la hora de entrenamiento. Para un deportista profesional que entrena mañana y tarde lo ideal es distribuir el 60 % de la energia en la primera mitad del día y el 40 % en la segunda.